
Se trata de una conversión de la recreativa homónima de Konami. Nos pone delante del consabido torneo de artes marciales donde demostraremos nuestra valía (o nuestra torpeza) delante de diferentes adversarios, cada uno con su especialidad. No podemos escoger personaje y las peleas son a un solo asalto, aunque tenemos varias "vidas" para continuar si somos derrotados.
El principal escollo en el que nos veremos es el tema de los golpes. Nuestro héroe es capaz de un buen número de ataques, pero al reducir los botones de la recreativa de dos a uno casi todos nuestros movimientos se traducen en una "posturita" del karateka, y nos puede llevar un tiempo aprender a controlarlo. Una vez aprendidos algunos movimientos básicos (por ejemplo, pegamos patadas con disparo más izquierda, derecha o arriba), la cosa se pone mucho más fácil.

¡Chupa patada voladora, Buchu!
Y entonces llega por fin el momento de descubir por qué la versión CPC sigue siendo la que más mola: Es rápida, muy rápida, tiene gráficos a 16 colores, un apartado de sonido competente y una buena cantidad de adversarios (más que las versiones NES y MSX). Y si emulamos la versión disco, tendremos sorpresa extra, un escenario distinto tras derrotar a "Pole", el cuarto contrincante:

Distintas disciplinas, ya... ¿por qué yo no tengo espada?
¿Y las otras versiones? A mí me gusta la de MSX, que es distinta en escenarios y oponentes, pero por haberlas hay incluso para NES, PS2 y XBOX360, dentro de las recopilaciones de Konami.